Trabajo, paro y chanchullos
El denominado subsidio del desempleo ("paro en España") fue instituido en la época de Franco y desde entonces ha sido "un nido de chanchullos"; puesto que desde entonces, todo el que llegaba a ese estado, lo que trataba y trata es de cobrar el tal subsidio y luego trabajar clandestinamente en lo que sea, así recoge el importe del mismo y además un sueldo o salario íntegro puesto que está libre de impuestos.
Se llega a los extremos, que aunque al subsidiado le ofrezcan trabajo legal, se niega a aceptarlo por cuanto dice con toda tranquilidad… "estoy en el paro y no boy a perderlo".
Por todo ello no se acertó en esta ayuda, por cuanto la misma, siempre debió estar condicionada a realizar un trabajo social, estatal, municipal o provincial; así se controlaban a los parados, se les obligaba a trabajar en "los mil trabajos que siempre tiene por realizar el Estado y que no los realiza por falta de presupuestos" y también se les obligaba o estimulaba para que encontrasen trabajo cuanto antes, puesto que los trabajos estatales que habrían de realizar, por lógica, siempre serían bastante "menos apetecibles de realizar y por causas obvias".
Hace muchos años y visitando por primera vez "la colonia de Gibraltar"; observé a un cuidador "turístico" que lo era, en el área donde pululan una de las dos manadas de monos que entonces había en "el peñón". Como me pareció demasiado viejo aquel hombre, le pregunté con habilidad y me enteré que era "un jubilado de la municipalidad gibraltareña"; y que para cobrar la modesta pensión que recibían, eran obligados a realizar trabajos auxiliares y según cada cual podía hacerlos con arreglo a su estado de salud.
He escrito muchas veces que todo el que pueda trabajar, debe hacerlo y sobre todo los que antes de jubilarse lo pueden hacer; incluso los presos, ejército (no crean que esto es nuevo, ya el Imperio Romano obligaba a sus legiones a realizar obra pública, cuando no estaban guerreando); y los presos por mayor motivo aún, puesto que si el que no cumple ninguna condena, tiene que cumplir con la condena de trabajar para vivir, lógico que el preso trabaje para costearse parte de los muchos gastos que ocasiona al erario público, que son muy cuantiosos y que invito a que el interesado lo averigüe y compruebe (una plaza carcelaria, solo en su construcción y la dotación mobiliaria y anexos, cuesta más que una vivienda para una familia).
El bienestar y por ende el progreso, vienen del trabajo positivo y del ahorro administrativo; todo lo que no se base en estos dos pilares, será un fracaso cuando no una ruina como la que ahora ahoga a España y otros países, en mayor o menor escala, pero ruina cuando no quiebra futura.
En cuanto a los parados "normales"; también se podría estudiar que el dinero que reciben, entregado a empresas que los contratasen por el tiempo de duración de ese paro, sirviera para estimular contrataciones productivas y así, ese dinero sería rentable a la nación y de paso, se controlaban los chanchullos antes apuntados. Es una idea que se me ocurre mientras escribo y que considero que bien estudiada y mejor aplicada, sería muy rentable para la economía nacional.
De nuevo son los británicos los que nos indican un camino a seguir y que concuerda con lo que les cuento de aquel jubilado gibraltareño.
"Los británicos harán labores comunitarias para cobrar el paro – Desde abril, los desempleados de larga duración, realizarán tareas como recoger basuras o cuidar ancianos". Lo que antecede son los titulares del diario ABC del 01-10-2013; el que igualmente le dedica una página donde informa con mayor amplitud; todo ello parte de un ministro de economía (Sr. Osborne) que efectivamente, se preocupa de la economía de Inglaterra, ha propuesto esa idea y le ha sido aceptada… "y no pasa nada"; para vivir hay que trabajar y dejarse ya de tantos chanchullos como han asolado España; y este es uno de tantos.
Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
www.jaen-ciudad.es (aquí mucho más)
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