Alemania, España, la Justicia y el pueblo
Acabo de leer, que al ex famoso futbolista alemán y que culmina su carrera siendo presidente del más famoso club teutón, el “Bayern”… y cuyo nombre es Uli Hoeness; fue descubierto como evasor fiscal y le encuentran hasta 27 millones de euros en Suiza; por lo mismo es juzgado y en sólo quince meses, ya va camino de la cárcel a cumplir condena… y sin que nadie se “raje las vestiduras y menos salgan otros del gremio o afines, a defender al tal delincuente, que como tal va irremisiblemente a la trena y sin protestar por la condena que le han impuesto y menos pedir indulto alguno”.
Observen que en mi titular figura primero Alemania y pueden imaginar acertando, que lo hago adrede y por aquello de la prioridad jerárquica, que con toda seguridad les otorgo a Alemania y “lo alemán” que han conseguido los teutones.
Para entender ello, no hay nada más que recordar algunos de los casos (hay infinidad de ellos) juzgados en España y en los que entran como reos, infinidad de figuras y figurones de toda “la nata social” de estos corrompidos tiempos que nos abruman; y la de subterfugios, aplazamientos, dilaciones, indultos, penas de pacotilla o incluso de cárcel confirmada por el que dice “Tribunal Supremo” y que luego los reos, logran soslayar e incluso borrar de su proceso mediante “bizcochos judiciales de la máxima altura y la mayor indignidad”. Considero no necesario nombrar a ninguno, puesto que desde “la casa del rey, pasando por la banca, la política, el deporte, las centrales obreras y empresariales, y llegando hasta la arena de las plazas de toros”… hay casos para comentar largo y tendido. No hablemos de ese enorme robo (es un robo lo clasifiquen con los subterfugios que quieran) ocurrido en Andalucía, dónde se pierden cientos y cientos de millones de euros, dentro “de la cúpula del gobierno autonómico”; nadie sabe nada de nada; en masa quieren defender “los pringados” lo indefendible, e incluso si algunos pudieran… “ya habían linchado a la muy íntegra juez que instruye el caso y que sigue investigando puesto que cada vez aparece más basura y más ladrones”. Si bien el caso se alarga más de la cuenta y apenas nadie va a la cárcel.
También ayer mismo, había en la calle, una gran manifestación promovida por las dos centrales obreras mayoritarias; por cuanto a algunos de sus afiliados los han condenado los tribunales españoles, a sentencias de cárcel, por delitos cometidos y tipificados en las leyes; aquí todos “los que tienen dónde agarrarse”, se agarran a donde sea y como sea, para que hagan lo que hagan queden impunes. O sea que en España, lo que hay es que “delinquir a lo grande, tener padrinos y esperar soluciones”… todo una delicia para un verdadero progreso social y económico.
Ni por asomo me gustaría haber nacido en Alemania y vivir allí; me siento muy español y meridional; y no cambio mi tierra de Andalucía, por ninguna otra del mundo… “lástima que aquí no la gobiernen como gobiernan en Alemania.
Estuve en Alemania por primera vez, en 1977 y en el mes de Julio. Visité alguna fábrica y donde se nos informó de todo lo concerniente a ella. Puedo decir que allí se controlaba desde “el primer tornillo… hasta las mercancías cuyo destino sería Brasil y el que por ser latitud tropical, aquellas mercancías (cosméticos) habían sido sometidas en laboratorio a pruebas de resistencia suficiente, como para no tener que admitirlas luego devueltas, por cuanto las mismas se habían estropeado y tener que admitir la pérdida cuando ya no hubiera solución”; con esa plena seguridad actúan.
Estuvimos incluso en alguna “juerga alemana”, en una gran cervecería y donde se bebían las peculiares grandes jarras, se bailaba e incluso había otros entretenimientos como para “niños grandes”; todo en orden y nada de que nadie “sacara los pies del plato”. Se me dijo que en Alemania, se bebe también “en grande” y que hay borrachos… pero que estos, se emborrachan (generalmente en su casa) los viernes por la noche y a lo sumo los sábados, puesto que… “el domingo tiene que reservarse para eliminar totalmente “la pea o mona”, ya que el lunes hay que ir frescos y plenos para rendir al máximo en el trabajo”; y donde por descontado no se permite bebida alcohólica ninguna.
Simplemente por este gran orden y gran disciplina, las veces que han derrotado militarmente a Alemania, ésta se ha recuperado a gran velocidad y ha vuelto a la cabecera de las naciones más importantes del mundo… y ahora que ya aprendió que con las armas no era efectiva su dominación; ha emprendido la guerra de las finanzas y del trabajo bien hecho (aparte de captar la más preparada juventud europea y de fuera de sus fronteras, venga de donde venga) y es por lo que estamos ya controlados “por ese cerebro común que los alemanes poseen y que los une contra todo y el que como la marabunta tropical consigue dominar lo que se pretende”.
En aquel viaje y como hacía calor, llegando a un lugar turístico (Una “Gran Valquiria”[i] que al lado del Rin representa la madre, las glorias alemanas y la unión germana) había una máquina automática de suministrar refrescos (“noten que hablo de hace casi cuarenta años atrás”) y la que funcionaba con una moneda de un marco… y como al mirar en el monedero, comprobé que esa moneda aparentemente era igual a la nuestra de cinco pesetas… “quise probar la eficacia alemana”, e introducí la moneda española en la ranura; pulsé y ni la máquina devolvió la moneda ni me entregó la bebida… viendo ello me retiré junto al grupo en que íbamos pensando que allí no pasaba” nada… pero no habían pasado cinco minutos, cuando el encargado o dueño del quiosco anexo, veo que marcha hacia la máquina, abre la misma… “saca la moneda que yo había introducido” y mirando al grupo, con una cara de desprecio que no olvidaré mientras viva… arrojo con todo el desprecio inimaginable la moneda al suelo y se marchó diciendo cosas que no entendimos pero que es de imaginar alguna de ellas.
Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
www.jaen-ciudad.es (aquí mucho más)
[i] Niederwalddenkmal
El Niederwalddenkmal fue construido para conmemorar la fundación del imperio alemán después del final de la Guerra Franco-Prusiana. La primera piedra del monumento a Niederwald fue colocada el 16 de septiembre de 1871 por Guillermo I. El escultor elegido para la creación del monumento fue Juan Schilling y el arquitecto, Karl Weisbach. El coste total de las obras se estima en un millón de marcos de oro. Mide 38 metros de altura, fue inaugurado el 28 de septiembre de 1883 y representa la unión de todos los alemanes.
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