13.2.06

LA INMIGRACIÓN AL OTRO LADO DEL ATLÁNTICO


Comentábamos los violentos incidentes ocurridos en Francia en noviembre pasado y donde, la inmigración inadaptada (y pese a los subsidios que han recibido siempre) se rebelaba contra el Estado, pegando fuego a miles y miles de automóviles (y otros bienes) la mayoría de ellos, propiedad de familias de inmigrantes ya afincados o descendientes de las primeras “oleadas” que recibieran los galos, necesitados de mano de obra sin cualificar. Pero es claro, al quedarse y éstos, procrear mucho más que los franceses, ocurre lo que irá ocurriendo en los demás países europeos… “chispazo tras chispazo y revueltas que no tendrán fin en muchas décadas, pues la integración no es posible a tan gran escala”. Lo escribí hace tiempo y es que, el asiático o africano, no se integran nunca o casi nunca; ellos traen “su trozo de tierra nativa con sus costumbres y religiones y ellos lo que hacen es, instalar su pequeña Asia o pequeña África en el lugar donde se instalan”… y no sólo ello, sino y como ocurre con los musulmanes; tratan por todos los medios de convertir a su religión y costumbres a cuantos más mejor; sencillamente por cuanto así se consideran más fuertes y protegidos. Ello choca frontalmente con el individualismo occidental y su libertad individual, conseguida sobre la base de siglos de luchas… mientras que esos inmigrantes a que me refiero, viven en su época… “denominémosle medieval” y de la que necesitarán mucho tiempo para superarla si es que lo logran y los dejan… “sus costumbres, santones y profetas, que les tienen bien lavado el cerebro”. Se resalta en el debate, la situación precaria, calamitosa o a punto de quiebra, de la economía francesa, por tanta concesión “social” que la ha arruinado, sobre la base de poco trabajo y muchas dádivas a propios y extraños, amén del latrocinio político que ha contribuido a ello.

En el debate entra un chileno (Chile es para mí, el país más próspero de la América de habla española) y el que manifiesta cuanto sigue.

“Hay inmigrantes que son una carga para Francia y muchos otros países.

Afortunadamente esto no ocurre en Chile, donde no hay ayuda social alguna para los inmigrantes. El resultado es que llega la mejor gente de Bolivia, Perú, Argentina y Ecuador. Los bolivianos son sumamente creativos, saben electricidad, mecánica, software, de todo; y han creado muchos negocios, el saber varios idiomas ancestrales además del español les facilita el pensamiento abstracto en software.

Los peruanos son dados al comercio y la industria, y también son un aporte positivo; porque gracias a ellos el intercambio de productos entre ambos países es inmenso. Y es falso ese mito de que se dedican a las drogas, se trata de comercio legítimo.

Conocí a un ingeniero ecuatoriano de software de instrumentación industrial que es descendiente de esas tribus que reducían cabezas. El me contó que eso fue un método terrorista usado hasta fines del siglo 19 para mantener el territorio libre de colonos, y que aunque "sea políticamente incorrecto", el método resultó y nunca fueron esclavizados. Bueno, este ingeniero es un verdadero genio de la programación y los algoritmos matemáticos, algebra de matrices en variable compleja para control automático, y nunca recibió ayuda del estado, y lo agradece, porque le permitieron demostrar su capacidad sin paternalismos. Trabajó con nosotros en varios proyectos por más de 3 años, sus programas eran elegantes, simples y muy bien estructurados, y funcionaban a la primera. Ahora está metido en el área de análisis financiero con bancos, que es un área que no conocemos, pero suponemos que lo hace muy bien.

Si el estado chileno ayudara a los inmigrantes le causaría un inmenso daño, su llegada tiene que ser así, sin anestesia, con esfuerzo, y los mejores lo logran, el resto vuelve a su país”.

Simple, claro, lógico y al parecer “todos contentos”, puesto que se supone que en Chile, no llaman a nadie y el que llega, forzosamente tiene que atenerse a las leyes chilenas y… “buscarse la vida como muchos nos la hemos buscado”, o sea con nuestros propios medios y sin apenas otra ayuda que la que oportunamente nos proporcionó nuestra propia familia, que normalmente son los padres… y esa es la vida; la vida lógica y positiva para todos en cualquier lugar, donde… “el que vale, vale” y el que no pues se queda “en la cuneta”… donde puede aprender si quiere, pues todo el que quiere aprende, máxime si conoce la mejor de las “carreras universitarias”… “la del hambre y las penurias de la vida”. Por mi parte y si todo es como lo cuenta el chileno, merecen mi felicitación y no dudo que la prosperidad chilena (ya notable) irá en aumento continuo.

¿Qué ha ocurrido en la “civilizada Europa y sus derechos humanos”…? pues lo que hemos visto y lo que estamos viendo; que todo el mundo se agarra como una lapa a los derechos que le ofrecen de “bóbilis bóbilis” y no quieren saber nada de obligaciones que incluso son antes que los derechos; al menos cumpliendo a rajatabla las leyes que rigen a un país… “medianamente organizado”.

De España (mi nación) mejor echarse a reír… “aquí se ha creado una inmensa Babel con múltiples torres, bíblicas o no (5 millones en pocos años) y que cuando empiecen a derruirse, ya veremos los que tengan que sufrir las catástrofes”. Insensatamente nuestros gobernantes, se olvidaron que hay 360 millones de hispano hablantes, que normalmente comen guisos parecidos y rezan al mismo Dios… cosa esta que junto al idioma común, es garantía de integración casi segura. Cosa que no lo será con los millones de africanos y asiáticos que ya tienen “carta de naturaleza española”.



Antonio García Fuentes
Escritor y Filósofo
www.jaen.ciudad.org