RICOS Y POBRES DEL MUNDO (“Cada vez más”)

En mi ya “largo caminar” y en mi época de agente de ventas, viajante, representante, “o como quieran llamarlo ahora” (“las cosas son las mismas pero las cambian de nombre”); trabajé (siempre a comisión) con multinacionales. De todas aprendí bastante, pero en una alemana y en las “clases aceleradas que nos daban en Madrid”, explicando sus productos y a quienes iban dirigidos; afirmaba aquel ejecutivo alemán… “nosotros fabricamos para una franja de consumidores que partiendo del centro, avanza hacia los extremos económicos, puesto que consideramos que en un mundo avanzado… los ricos y los pobres serán menos; y mucho más abundantes, las clases medias”. ¡Eran los felices años sesenta del pasado siglo! Han transcurrido más de cuarenta años… ¿cómo va el mundo?... pues ya lo estamos viendo y padeciendo… cambió totalmente de rumbo; y en el planeta, hoy; son mucho más abundantes tanto los pobres como los ricos… los primeros inmensamente más y los segundos, puede que menos que entonces, pero… mucho más ricos, por cuanto se afirma que pocos cientos de ricos, se reparten las riquezas del mundo.

Por tanto aquel ejecutivo, que era portavoz de una muy organizada empresa y cuyos fines eran “bastante nobles”; se equivocó, lo equivocaron, o las directrices han cambiado; puesto que la empresa sigue existiendo y fabrica, hoy también (y sin olvidar a las clases medias) “gamas altas, para el alto poder adquisitivo”… “son los tiempos y hay que adaptarse al mercado, pues el dinero es el dinero y no importa de qué capas proceda”.

Sonrío con cierta tristeza al recordar aquella época y otras anteriores y cuando existía la denominada “España de la alpargata y el pan y aceite” (a veces no hubo ni pan)… y de la que se pasó (“en tiempos de Franco y hay que decirlo, aunque hoy ello sea pecado”) al calzado de piel, el coche utilitario, las vacaciones pagadas de treinta días, la vivienda de protección oficial… comer caliente todos los días; y tener para cerveza, gambas, viajes y “el no va más”; que ni soñamos sólo unos lustros antes; sobre todo, los que fuimos “las más castigadas” víctimas de aquella inútil guerra civil, tramada y ejecutada por inútiles gobernantes… “que en paz descansen…amén”… Y pese a que algunos perversos quieren resucitar “aquello”.

Sí, sonrío “de oreja a oreja”, al leer cuanto sigue y que copio literalmente:

“Ricos que gobiernan a pobres (grandes titulares): Castro y Obiang, entre los diez jefes políticos más adinerados del mundo, según Forbes” (titulares medianos; y sigue en tipos normales): “Para sorpresa de muchos, el presidente de Cuba, Fidel Castro, y el de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang, ocupan el séptimo y octavo puesto de la lista que elabora cada año la revista Forbes con los nombres de los diez líderes políticos más ricos del mundo”: Abdulá: rey de Arabia, 16.800 millones de euros (se da en euros y no en dólares); Ají: Sultan de Brunei, 16.000; Jalifa Presidente de los Emiratos Árabes Unidos, 15.200; Mohamad: Emir de Dubai, 11.200 (“Alá es Grande y permite a sus fieles ser los más poderosos en dinero, de este pobre mundo, mientras de los países islámicos pobres, o empobrecidos por tiranos absolutistas… huyen en masa, el resto de creyentes, en busca “del bienestar cristiano” (no somos nada). Los seis restantes hasta “la famosa decena”, son; aparte de los citados (socialistas y comunistas: hay que reír a mandíbula batiente, viendo lo que poseen y como viven los guineanos y los cubanos)… “cuatro pobrecitos europeos, entre los que se encuentra, la menos rica, Reina de Inglaterra y “demás territorios imperiales”, Isabel II, que sólo tiene 400 millones de euros (menos que Obiang (480 millones), que los “ha juntado en pocos años y menos que Fidel (720 millones), que tampoco ha necesitado muchos años para hacer fortunón): Alberto de Mónaco, que también acumula más que la citada reina, puesto que se afirma tiene 800 millones (¿Cómo de tan minúsculo país se puede obtener tanto rendimiento?: misterio) La “pobre” reina de Holanda (Beatriz) que sólo posee “la mísera cantidad” de 215 millones y otra gran sorpresa: otro “mini rey (Hans II), de otro mini Estado” (Liechtenstein) el que tampoco me explico, de dónde y como ha acumulado esa “gran fortunita” de 3.200 millones.

Pero ésta lista no está completa, faltan los magnates (“o mangantes”) de imperios “sin corona” y que sabemos; son inmensamente ricos… quizá, sus riquezas, “las tienen diluidas en miles de empresas y docenas de paraísos fiscales, donde la curiosidad periodística no tiene entrada”… “pero haberlos háilos”… Seguro… y; “a los pies de Dios”… como jurábamos de niños… “sin imaginar, siquiera, lo que íbamos a ver cuando fuéramos grandes”.

PITÁGORAS: Lo dijo hace dos mil quinientos años: “No aspiréis jamás a la vanidad de ser ricos; contribuiríais a que hubiese más pobres”… Inútil prédica en éste pobre mundo; hoy más materializado que nunca… ¿Quién se acuerda de éste Maestro; o de Cristo?.

Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
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EL SOÑADO “IMPERIO VASCO”

Cierto aquello de “cosas veredes Sancho”. Ya no falta, nada más que esos “vascos que quieren (la mayoría silenciosa se supone que no), el oro y el moro”; pidan la anexión de algún territorio americano, so pretexto de que uno de sus antepasados, guerreara (en nombre de España) por la posesión de tan lejanos territorios.

Entre tantas barbaridades como se han publicado, leo una que ya acaba con la capacidad de asombro de cualquiera; puesto que nada menos que en los años sesenta del pasado siglo y “reinando Franco en España” (1963) un denominado ideólogo de la ETA y de origen alemán y posiblemente, influenciado por el imperialismo germano, de sus antepasados; “inyecta la idea expansionista” en esos vascos, separatistas que aparte de serlo, se convierten (aparte de en asesinos) en conquistadores e imperialistas, al aceptar tan incalificable disparate; veamos el por qué de ello.

El delirio, se inicia a finales del siglo XIX y procede del nefasto Arana, “plantador de una semilla absurda”, puesto que vascos y Vascongadas, estaban ligadas a España hacía muchos siglos; tan es así, que su principal ciudad (Bilbao) la funda a sus expensas un señor de Castilla. Y es precisamente en Vizcaya, donde Arana inicia su labor destructora, pero en forma “muy modesta” o localista; puesto que “el bueno y cristiano vasco”, se limita a proclamar o pedir… la independencia de Bizkaia, lo que deja escrito en su libro, con tan significativo título: “Bikaia por su independencia” y a la que luego aumentarán otros fanáticos vascos de las dos provincias vasco españolas restantes… pero no la mayoría de ellos, ni mucho menos. “La mayoría fue impuesta sobre la base del terror de las pistolas y las bombas”.

Pero prosigamos con el delirio imperialista; puesto que según se ha publicado; ya en esa época del Franquismo; se proyecta un denominado “gran Euskadi”, que, asómbrense o ríanse a mandíbula batiente, puesto que “aquellos angelitos”, dictaminan que en “ese imperio” deben entrar, los territorios siguientes.

Navarra (que en cierta forma, les es vital, puesto que es “el granero y despensa”); la denominada “baja Navarra”, o los territorios franceses denominados Iparralde; y que comprenden Lapurdi, Bembarra y Zuberoa (en total un pequeño territorio similar al de Álava); todo lo cual tiene un somero respaldo de “lengua o etnicismo” (si bien, vete a saber “las leches que entraron en el queso” y esto lo tengo explicado en uno de mis artículos de hace ya tiempo). Pero aquellos “angelitos” y soñando, soñando, “pidieron la Luna”; puesto que pretendieron y por lo visto lo siguen pretendiendo algunos; el que; el “territorio vasco”, debía comprender… “El viejo reino de Aquitania, es decir, no sólo los territorios franceses ya citados, sino una zona mucho más amplia que llegara hasta Burdeos. Esto en lo que a Francia se refiere; puesto que estos “visionarios locos”, incluyeron a la actual Rioja, toda Huesca, parte de Cantabria, el norte de Lérida, Andorra y el valle del Ebro hasta Zaragoza”.

Y es claro que pensando en, “la colonización económica; luego lograda con gran profusión por el capitalismo vasco, que a mi entender, ha sido siempre el que ha fomentado estos movimientos, que como se ve, no son otra cosa que colonialismo puro, o sea… dinero, dinero y dinero”.

Todo esto es mucho más demencial, que si por desgracia, surgiese “un movimiento de igual tipo en Andalucía” y desde este “apacible y civilizado Sur de España”… se reivindicasen, los territorios del Califato de Córdoba, que como sabemos, comprendían casi toda la actual España, que “fue propiedad del mismo”, y el resto le tributó vasallaje… pero aún así, esos hechos y como tantos otros en la historia del hombre, hay que olvidarlos y vivir en la actualidad; procurando vivir en paz, concordia y unión nacional; que es lo que hoy falta, no sólo en España, sino en la mayor parte del planeta.

Así las cosas y tras aquellos separatistas, convertirse en asesinos terroristas y masacrar a casi un millar de españoles de toda España (incluido un número de niños); dejar miles de heridos y muchos miles más de “heridos en el alma”; provocar con la connivencia de un Gobierno débil o ya “títere”; una manifiesta desestabilización nacional y crear la inquietud y zozobra que padecemos… ahora pretenden (sin renunciar a nada de estos disparates y menos pedir perdón por sus asesinatos: manteniendo las armas en la mano, para mayor escarnio)… pretenden, digo, “ganar una guerra, nunca declarada”, que les pongan en libertad a sus asesinos y que encima, les asignen puestos de vida cómoda y pagada por el contribuyente… “O sea, lo que ya dije en un artículo… pedir vaselina, “filante o mentolada” y que pongamos el culo en la posición que mejor les venga en gana… “cosas veredes Sancho… y viva España”, o lo que de ella vaya quedando, según marchan las cosas y los inútiles políticos que tenemos; que ya ni nos aseguran vida y hacienda: que es (no se olvide) la base del pago de impuestos, que se impusiera en tiempos feudales”.

Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
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TODO POLITIZADO. ¿Qué es en realidad la política?

Sí… es una de tantas grandes preguntas que cualquiera, medianamente inteligente, se hace. Todo se ha reducido a controlar el dinero público y usarlo para tener y mantener todos los resortes que mantienen el poder ("pero sólo por el poder"). Y esto va desde "el mantenimiento" del político "más lejano al más próximo". Desde "un enjambre de ONGs u organizaciones sin aparente ánimo de lucro", a organizaciones "obreras o empresariales", incluidas "cámaras y colegios", que mediante "leyes y subterfugios", perciben lo suficiente para mantenerse con holgura y así… "hasta los credos, que de igual forma (muchos) se sostienen gracias a los aportes que reciben del erario público. Es más… "hasta existe el denominado voto cautivo"; que existe por cuanto es cautivado por el generoso aporte, que reciben… "los bolsillos que conviene". ¿No es esto algo parecido a lo que estableció el tan criticado Franco?

En realidad y en lo intrínseco… "nada nuevo y que no se empleara desde la República de Roma, con su "manido pan y circo" y lo afirma lo siguiente.

"El patricio romano Cayo Julio César, el viejo (100-44 a. C.) nos lo demuestra con gran desprecio, manifestando lo siguiente: "Si la clase media sirve para algo es para trabajar y pagar impuestos, con los que podemos sobornar a la plebe de Roma y tenerla contenta y mantenerla dócil. Es cierto que los plebeyos de Roma son animales, pero son muchos y necesitamos sus votos para alcanzar el poder. Que la clase media nos sirva hasta el final, porque los nuevos ciudadanos no piensan nada más que en el trabajo, la industria y el ahorro y otras preocupaciones por el estilo".

Marco Livio Druso (122 a. C.) tribuno de la plebe, dice: "Es difícil decir quienes son peores, si los que sobornan a las masas o las masas que aceptan el soborno. Es cierto que el soborno corrompe, pero también es cierto que el que lo acepta es el mayor de los delincuentes".

¿Qué ha cambiado? ¿El antiguo circo, al moderno "estadio" de masas? ("hoy, cuando esto escribo: deliran millones de terrícolas por "un mundial de fútbol, que en nada les va a solucionar sus vidas")… ¿Ha cambiado la cabalgadura y se ha pasado del caballo o carro romano, a la motocicleta o el automóvil? ¿En qué ha cambiado (en el fondo) la sociedad o pueblo? ¡Sí… en que "grandes masas" comemos y vivimos mejor y más tiempo! (pero dos tercios de la población mundial, están en la miseria)… igual ocurre con muchos animales y frutos que consumimos ("son más gordos, pero no tienen sabor "natural") por cuanto, "las ciencias del consumo avanzaron hasta situarnos en el estado actual… y en el que los políticos, ni saben, ni piensan, ni quieren reconducir y pese a que está demostrado, que el desenfrenado consumo que soportamos tiene que terminar… "o acabamos con todos los recursos del planeta"… ¿y entonces?

Pero en ello estamos o nos encaminamos… "en ese ir muy deprisa hacia ninguna parte"… "una sociedades engordadas y cuidadas dentro de un sistema estabulizado" (como se hace con los animales, pensando en el peso y rendimiento, sólo)… para que ésta viva, produzca, se entretenga y "muera"… sin mayores preocupaciones y menos inquietudes de verdadera lucha humana, por mejorar integralmente "en cuerpo y alma".

O sea… mantenerse en lo que se ha venido calificando ficticiamente como… "lo políticamente correcto" (la política es el arte de gobernar bien a los pueblos) y perversamente tratando de dejar fuera del sistema… sólo a "los apestados"… o parias que nada significan por cuanto nada producen. E igualmente a los rebeldes, por cuanto "pensar y deducir", sigue siendo muy pernicioso… "pernicioso para los poderes establecidos" (aunque en realidad es uno sólo y tristemente se denomina dinero")… o sea, tratar de llevarnos y de la forma que sea, "a la nueva esclavitud", que imperaba en la época en que hablan, los patricios romanos arriba indicados.

¿Qué aún queda mucho para ella?... mientras esto escribo (hoy 11 de junio de 2006) ha sido detenida una banda en mi propia Andalucía, compuesta por unas docenas de "sicarios", los que y abiertamente se dedicaban a "vender o alquilar", nuevos esclavos (nada menos que brasileños: ya no hay que asombrarse de lo que se hace con los africanos) y lo venían haciendo, "a lo grande" y con la complicidad de vete a saber quién o "quienes". Si esta banda existe… ¿Cuántas hay ya operando, aquí o en tantos otros lugares del mundo, que idiótamente se denominan civilizados?... en qué… "y los políticos, pensando sólo en el dinero y en tener siempre bien guardadas sus espaldas"… ¿El pueblo?... leamos a "los patricios".

Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
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EL PUEBLO ESPAÑOL (Su realidad… la del catalán)

Partamos de la base cruda y real, de que el político, la política, el gobernante; generalmente ve al pueblo como “la res pública” (“vaca lechera”) a la que se tiene y gobierna, para eso mismo, para cuidarla en lo mínimo y sacarle el máximo; y eso, el pueblo lo sabe o lo intuye de forma natural; por tanto la reacción en Cataluña ha sido la real y cruda, de… “para qué votar, si éstos van a seguir haciendo lo que les venga en gana; nosotros somos impotentes y sólo nos quieren para pagar… por tanto comamos y bebamos que mañana moriremos”. Esa es “la molicie” en que terminan los pueblos con los que no se cuenta para nada en absoluto. Puesto que es cierto; si en España se refrenda (por el pueblo en masa) una Constitución, hace ya treinta años y sin casi desarrollar ni la letra ni el espíritu de la misma (han hecho lo que les ha dado la gana los cacareadores de la misma: lo que han aprobado es ilegal) ahora, nos quieren colocar nada menos que diecinueve, constituciones (Ceuta y Melilla incluidas) y convertir lo que sigue siendo una nación, en una “olla de grillos locos”… ¿qué va a hacer el pueblo que piensa y el que no?... pues lo que ha hecho, comer beber, irse a la playa o quedarse durmiendo en casa y a los políticos, pues que les vayan dando… “muchas más prebendas y sinecuras de las que ya se han asignado y que son infinitas”. Toda una lección al fracasado sistema político español, que ha terminado con todas las ilusiones de un pueblo.

¿Qué ha votado menos del cincuenta por ciento y de ellos un treinta por ciento no ha dado el si?... Hagamos lo que los políticos y “juguemos con las cifras”. ¿Si a los que han votado el si, pudiéramos deducir la infinidad de “enchufados o beneficiarios” de lo que esperan recoger… cuantos ciudadanos libres en verdad, han dado el si? ¿Entonces que democracia es ésta que “se lo traga todo”? Recordemos que recientemente e internacionalmente, se fijó en que unas elecciones serían válidas, si el 55 % votaba sí (Montenegro)… ¿Entonces que es esto… una democracia? ¡No se lo creen ni ellos! Lo que ocurre es que viven y viven bien, a costa de tanta mentira y ante la impotencia de un pueblo que sólo lo requieren para pagar y votar.

Significo en este caso, que tengo al pueblo catalán, cómo de los “más avanzados” de los de toda España y por ello mismo, han estado siempre a la cabeza en lo económico, oficios y carreras universitarias, etc. Bueno “pues se han ido a la playa”. ¿Por inútiles?, no, ya lo he dicho antes… “por cuanto en mayoría se sienten impotentes”.

Los pueblos los forman o deforman sus gobernantes y a la vista está lo que cada día nos muestra ese pueblo, que en realidad es “una masa” dócil (ya lo calificó bien el Imperio Romano con la palabra “res”, que como sabemos designa a cantidad de animales). Por ello somos pocos los que pensamos y sabemos, que… “La política es el arte de gobernar bien a los pueblos y que por tanto, es algo tan importante y tan delicado, que es temerario dejarla sólo en manos de los políticos. De ahí la imprescindible necesidad de que existan organizaciones cívicas y fuera de la política, que conformen una fuerza que no deje actuar impunemente a los políticos, puesto que si no es así, se corrompen y a la vista está ello en todo el mundo actual”.

Por ello ocurren las aberraciones que vemos constantemente y ahora mismo se repiten, con esas absurdas manifestaciones por cuanto “el equipo barcelonés” ha ganado una copa, o el “sevillano” otra; o también y lo oigo mientras escribo… “veinte mil españoles se van a desplazar a Alemania, para ver no se qué encuentro entre un par de docenas de individuos que le dan patadas a una pelota”… ¿qué va a reportar esto a la res pública?... nada en absoluto, pero están deformados por unas enseñanzas dirigidas exclusivamente por la política imperante del hoy “pan y deportes”.

Todas las masificaciones son deformantes y enmascaran unas realidades subyacentes muy preocupantes; y ello se demuestra en la verdadera responsabilidad masiva de “la res pública”, o sea las votaciones en las urnas, que afortunadamente hoy tenemos; pero idiótamente (“la res”) y en lo más importante de su misión “de control”, declina su máxima responsabilidad y lo hace en mayoría con la terrible frase de… “la política para los políticos”… ¡No… absolutamente no! Ya lo digo arriba el por qué de ello. Si la mayoría del pueblo no asume sus responsabilidades, esto acabará mal… y en España, tenemos la década de 1930 a 1940 como la mayor tragedia de su historia y que no debiera repetirse, pues si se repitiera… ¡¡Lo mereceremos!! Tomen nota los políticos actuales, puesto que, “tal y como están las cosas”… ¡¡Es su responsabilidad!! ¿Sabrán en realidad lo que tienen sobre sus espaldas hoy?

Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
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“DE CÓMO SE ROBA EL DINERO PÚBLICO”

Primero y en un mundo plagado de mentiras y palabras que las ocultan, sepamos cómo califica el diccionario de la RAE, la palabra robar y preocupémonos de aplicar las palabras más contundentes, para aquello que lo merece. Pues bien, la academia dice que robar es: “Tomar para sí lo ajeno, o hurtar de cualquier modo que sea”. Está pues, claro y diáfano que robar es todo hecho que conlleve llevarse lo ajeno… “legal o ilegalmente”, puesto que esa es otra… “lo legal es muchísimas veces ilegal, por cuanto se emplea la fuerza para lograr los fines” (la ley natural es más limpia que la escrita, puesto que se basa en la lógica deductiva)… y lo de fuerza, lo mantengo, puesto que hay infinitas forma de ejercerla… y se ejerce a ojos vista y lo vemos.

Se hacía público a través de una cadena nacional (la más oída en la actualidad: COPE) lo siguiente: “73 millones de euros en un año, repartidos entre amigos y afines en “Informes tapadera” (sobre la perdiz, gaviotas: no se si también sobre “grillos cebolleros” y otras chuminadas). El interviniente en tan popular programa, sigue enumerando una lista interminable, de hechos concretos y que están en los archivos de la tan “pomposa Generalidad catalana” (no hablemos de “los tantos por ciento”, que en asignaciones “se llevan” y que fue denunciado incluso en el parlamento catalán. ¡¡Y no pasa nada!! ¿Pero es que Cataluña es única en “estas cosas”?… ¡¡No!! Veamos otra “autonomía” y citaré sólo estas dos, por cuanto en conjunto, suman “un tercio de habitantes de toda España”… ¿El resto? Para que hablar, puesto que como “todo lo malo se pega” y hay impunidad segura… “pues eso”.

En rueda de prensa, la vicesecretaria del partido en la oposición (PP) denuncia que: “La Junta de Andalucía se ha gastado 70 millones de euros en actividades publicitarias (algo más de 11.600.000,00 de las antiguas pesetas). ¿Todo éste inmenso capital, se ha gastado escrupulosamente y con el sentido empresarial y de rentabilidad comercial que precede a cualquier inversión en publicidad? Ello es increíble, viendo los espacios y material publicitario; lo que denota a cualquiera, medianamente versado en publicidad, el mucho que de ello, va destinado a “empresas o empresarios afines” y los que así, disponen de enormes cantidades, que se justifican, pues no faltaba más. “Todo aparecerá como escrupulosamente legal”: ¿lo es? ¿Pero, era necesario tan cuantioso gasto, habiendo tanta carencia y abandono en cosas que son mucho más precisas y que se están denunciando constantemente? No, absolutamente no.

En Madrid y “a la máxima altura política”, ocurren cosas así: “Los parlamentarios tendrán la pensión máxima con sólo siete años en el escaño: se aprueban fondos de jubilación e indemnizaciones por cese o disolución”. Con toda la cara dura del mundo, la máxima desvergüenza y sin remordimiento alguno… “Sus señorías señalan que el objetivo es situar a los diputados españoles en un nivel equiparable a la media de los países de nuestro entorno”… Como para echarse a llorar o mondarse de risa… ¿pues qué remedio? En todos estos latrocinios no pintamos nada, los que sólo “somos necesarios” como pantalla: para pagar impuestos sin rechistar y para ir a votar cuando “los elegidos de antemano”, nos llaman… “o sea el circo actual”.

Sí, se puede decir mucho más; pero que sean los hechos posteriores los que lo digan. Un poco de tiempo después, “en la cámara del parlamento” (adrede y con minúsculas) se aprueban, nuevas normas, que van a trasladar a leyes; para que cualquier trabajador, que se jubile, cobre mucho menos y posteriormente (65/70 años) a lo que ahora “nos han dejado de paga al pensionista”, que como promedio, no llega ni a los 600 euros… “nuestros padres de su patria, no han tenido escrúpulo alguno en asignarse esa máxima paga y con tan corto período de cotización, lo que han aprobado por unanimidad tanto en el congreso como en el senado (con minúsculas)”. Digamos igualmente, que visto como “actúan” en Madrid; en “las autonosuyas” (que no nuestras) todo el que ha podido, ya se ha procurado, la principesca vida para cuando se retire, o lo echen de la poltrona… y entre ellos, cito a dos “opuestos” (a la hora de asignarse pagas y prebendas, son exactamente iguales) por significar a los dos partidos principales (PSOE y PP: o viceversa, me es igual) puesto que me refiero al señor Chaves, presidente en Andalucía y al señor Zaplana, presidente que lo fuera de Valencia, también citaremos a “nacionales”; entre ellos Felipe González (“por ser el primero) y últimamente el demagogo “Bono” (el manchego)… ¿Cuántos iguales o similares hay ya en el resto de “los 21 parlamentos?(17 autonómicos, ceutí y melillense, senado y diputados nacionales)… saber toda la lista, “nos llenaría de unas alegrías… como para explotar de indignación”… ¿Constitucionalmente todos los españoles semos iguales?... sí, ya lo significo con la antigua palabra de nuestro idioma… “semos capullos impotentes y además, sin visos de dejar de serlo”. Puesto que aquí “se ha dicho y escrito todo, nos dejan hacerlo”… ¿pero para qué sirve?

Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
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¿DEPORTE… QUÉ DEPORTE?

Cuando esto escribo, una serie de “deportistas” y bajo incitación de “técnicos”; mantenían “un banco de sangre, debidamente preparada”, para serles inyectada en los momentos oportunos, para que su organismo rindiera al máximo posible. Se ha publicado que principalmente son ciclistas, pero la investigación sigue y ya sabremos a “cuantos gremios afecta”. De hecho han metido en la cárcel a un médico y el proceso sigue, puesto que al parecer, es de bastante envergadura y sobre el mismo se mueven enormes cantidades de dinero (“siempre el maldito dinero”).

No hace mucho (algunas semanas) y en una competición pedestre; un competidor, gana una carrera y marca un nuevo record… ¡¡De uno o dos segundos!! (creo recordar) y por ese hecho, para el cual han tenido que pasar “no se cuantos años”… el individuo se cree “un dios” y los miles y miles de espectadores… gritan como energúmenos, se levantan y agitan convulsivamente; y se muestran llenos de una euforia, que no se entiende… al menos yo no las entiendo en absoluto, puesto que se repite; en esos monstruosos “nuevos estadios”; con una frecuencia que asombra… ¿Puesto qué… qué es lo que aportan esos hechos para una mejora de la humanidad?... ¡Nada, absolutamente nada… sólo el moderno “opio” para entretener a las masas en algo sin valor, para ellas mismas!. Pero sí muy valioso para los que gobiernan y los acumuladores insaciables de dinero, que siempre aportan “las masas”.

DEPORTE: Según el diccionario de la RAE, es. Actividad física, ejercida como juego o competición, cuya práctica supone entrenamiento y sujeción a normas. Que en cierta manera (“no toda”) refleja lo que los sabios griegos asignaron a este “juego humano” y el que; sobre la base de “cuerpo sano en mente sana” (es la mente la que dirige al cuerpo)… pretendieron, derivar los instintos de guerra y lucha, en unos ejercicios gimnásticos para que con ellos… “el hombre eliminara sus instintos animalizados”. No lo consiguieron y a la vista está hoy, el bochornoso espectáculo que presentan la inmensa mayoría de los denominados deportes; dónde el individuo que llega a ciertas “alturas” (y lo de altura es un decir); es capaz de realizar lo que sea, por llegar a ser el primero… y mantenerse en ese puesto, aunque para ello se tenga que jugar la propia dignidad, o incluso… la vida.

De risa o de pena… “puesto que hay que analizarlo a fondo”.

¿Pero esto es nuevo en el mundo? No; “el mundo y el hombre hemos cambiado poco a lo largo de “milenios”. Veamos un resumen histórico de lo que afecta al “deporte y los espectáculos públicos y masivos, que para entretener a la chusma o plebe, se empleaba en Roma y resto de su imperio”.

“El Coliseo que podía contener a 60.000 espectadores. El Gran Circo, de 600 metros por 200. Los principales juegos, eran las carreras de carros o de caballos. Bajo los Flavios llegaron a celebrarse hasta ciento en una sola jornada, cubriendo cada una la distancia obligatoria de cinco vueltas a la pista, es decir un total de… ¡284 kilómetros! Los ídolos lograban hacerse con una inmensa reputación y fortunas, en particular los “miliaril” o vencedores de mil pruebas. El auriga Diocles, unas 5000 veces victorioso, se retira hacia el año 150 con una fortuna de 35 millones de sestercios (“un fortunón para la época”). Figuras “menores” fueron recogidas en la historia: Las apuestas eran muy elevadas en cada prueba. A los juegos ecuestres, el circo añadía los juegos atléticos o gimnásticos; los combates de fieras, en los que con demasiada frecuencia intervenían hombres. Tres grandes teatros, sumaban otras 60.000 plazas para espectadores (hablo sólo de Roma, pero “en provincias” se seguía lo que la capital “marcaba”). Si bien se daban espectáculos teatrales, de música y danza (en decadencia todo ello)… la chusma o plebe, enardecida y aburrida… gritaba, agitada y puesta en pie… “¡Las bestias! ¡Los pugilistas! Entre las distracciones favoritas estaban los gladiadores y sus luchas cuerpo a cuerpo y casi siempre a muerte; y de lo que podría relatar hechos concretos, pero mejor dejarlos por lo repugnante de algunos de ellos. ¿La delincuencia y miseria?... similar a las de hoy, pero ello sería motivo de otro artículo.

¿Aceptarían “algo” de ello hoy… las masas (hastiadas o aburridas), e incluso “las clases superiores en dinero”?... No sé, pero se aceptan las luchas de boxeo y lucha libre (donde llegan a morir hombres, o quedan “noqueados/sonados de por vida”) y donde muchos enardecidos gritan… ¡Mátalo, mátalo! Los toros en sus múltiples y sangrientas variedades. Las luchas de perros y de gallos, donde corre la sangre y mueren los que intervienen y pierden… y ¿cuanto más, que se sepa o esté oculto?

Pretender detener al ya… “diluvio mal llamado deporte”… hoy es imposible; pero sí que sería conveniente, el que los padres y maestros de escuela, enseñaran a sus hijos o educandos, que… “la carrera deportiva en un infierno (que poco o nada aporta a la vida del hombre)… y el que llega al final (“millones quedan en el camino, derrotados o angustiados”)… normalmente y tras las efímeras glorias; “vivirá sus propios infiernos”… puesto que, desaparecidos de esos falsos pedestales… son muy pocos los que asumirán, “el destierro forzoso”… y sus realidades… se ven de vez en cuando… si bien, la mayoría siguen ocultas.

Antonio García Fuentes
(Escritor y Filósofo)
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FRANCO Y “FAMILIAS”, II REPÚBLICA Y “OTRAS MUCHAS”

En un artículo es imposible, ni siquiera (aunque lo intento) sintetizar lo que he indicado en mi titular, que incluso va doblemente entrecomillado… como queriendo significar, que entre las comillas hay tanto campo para hablar e imaginar, que esas “comillas”, siempre tiene que cerrarlas el lector; sobre la base de “su leal saber y entender”… de ahí el que yo emplee las comillas y el significado que les doy y que muchos me critican… pero… “cada cual tenemos nuestro propio idioma y nuestra propia forma y manera de emplearlo”… y tratamos: yo así lo hago… de ser entendido al máximo posible y con arreglo a mis propias posibilidades, que como la de todos… “son siempre limitadas”.

Vengo (desde hace largo tiempo y ahora más) escribiendo y hablando, sobre el (al parecer) inacabable asunto de; “Franco y la II República ESPAÑOLA”; de lo que los demagogos actuales; hacen bandera perniciosa y no aclaratoria de estos desastres (que lo fueron; pero “unos mucho más que otros”)… y lo inteligente y cuerdo, es: hablar de todo ello y tratar de hacerlo, si es preciso… “incluso mordiéndose las propias entrañas al recordar heridas y otros muchos padecimientos” y para que ello sirva a las nuevas generaciones y no sólo españolas… “que el mundo sepa lo que pasó”.

Bajo ese propósito yo lo hice y lo hago siempre; puesto que mis propias vivencias (cuento ya 68 años); mis lecturas y meditaciones; incluso mis deducciones, que desde niño pude hacer… ya que si no, “la Guerra Civil y la República”… sí que “viví muy de cerca, la otra terrible guerra, cual fuera el simplemente vivir y aprender a vivir, con todos los vientos en contra”… y al propio tiempo, ir observando todo cuanto al alcance de mi vista y “oído” quedaban; ya que; y como “inicio de carrera”… me ponen a trabajar a los siete años de edad y lo que no me pesa en absoluto; puesto que ello, fue… “entrar en la mejor de las universidades del planeta… o sea estudiar la vida… viviéndola”; y lo que hoy considero como un privilegio, por cuanto… “quienes saben de montaña y ribera… saben lo fuertes que son los árboles de una y lo débiles las de otra”… y “yo he sobrevivido y llegado al final de mi carrera sin grandes daños y bien curtido por todos los vientos soportados”.

He escrito y ahora más; simplemente para, “difundir ese saber que no se sabe nada”, pero que algo o mucho de esas experiencias; puedan servir, principalmente a la desorientada juventud que hoy vive y que no la engañen y deformen más, los demagogos de turno (que siempre ha habido); y que puedan tener otros “canales” de información, diferentes a “los oficiales o políticos de partido; y política de estómago y bolsillo (bolsillismo lo denomino yo”)… que es lo que tristemente impera en esta “amorfa” realidad en que nos quieren hacer vivir. Y que igualmente sirva, para aquellos “más o menos viejos”, que cegados bajo un punto de vista, “fijo o incluso fanático”; sepan (si quieren) reconsiderar y ver desde diferentes ópticas, la realidad pasada y se enfrenten a ella con la entereza que es necesaria; y sin miedos a nada.

Afortunadamente muchos otros, han hecho y siguen haciendo similar trabajo; y “nadando contra corriente, dicen sus verdades… con lo terrible que en España, es… salirse de los carriles de lo que hoy se denomina, correcto, en política”… y que no es otra cosa, que lo terrible del “péndulo”… “izquierdas, derechas, rojos, azules, católicos, ateos, etc., etc. O sea el terrible, “conmigo o contra mí”.

Por todo ello, he escrito dos trabajos y pese a lo sintetizado de los mismos, han resultado… “unas cuantas docenas de folios”, que hay que difundir… y como el libro en España, ya es en mayoría “montañas de papel impreso y de ocasión” (excepciones aparte)… es dificilísimo entrar en esa, “manigua dominada por pocos intereses; y que se dedican a eso que ya he dicho, o sea, vender montañas de papel impreso”… yo he adoptado “mi propia imprenta y los infinitos medios que gratuitamente tenemos hoy para emplearlos”; y con esa gratuidad lo ofrezco a quienes quieran aprovecharla.

¡Si!... es claro que me refiero a Internet… “ese universo que contiene tanto malo, pero igualmente tanto bueno; y que esta a nuestra disposición y a un ridículo coste”. Así en mi web pueden encontrar esos dos trabajos, que he titulado: Franco y “familias” y II República y “muchas otras más”… y de los que espero noticias, que pueden enviar por correo electrónico, el que aparece en portada. Gracias.

Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
www.jaen.ciudad.org (allí más temas)

¿ESTADO DE LA NACIÓN… O DEL PODER? (Indiferencia del súbdito, que no ciudadano)

Entre tantas mentiras como cada día “se nos lanzan”; una más es esa “feria” que los políticos organizan, para decirnos (sin que lo creamos en absoluto) “el estado de la nación o el de “las autonomías”. Recientemente fue “celebrado” el primero y sólo días después, ya ni los políticos hablan de ello. Han cubierto “etapa” y “a otra cosa mariposa”. Por otra parte, “la inundación” de noticias diarias, sumergen en el olvido todo lo anterior… “lo de ayer, ya no es noticia y hay que embotar a la masa, con lo de hoy”. Es la forma más perversa de que “nadie se preocupe ya por nada”, salvo excepciones” y por ello escribo hoy… “excepcionalmente” y aunque sepa de antemano que no va a servir para nada… “salvo para alguno que piense y defina por sí mismo”.

Sí, se ve (se ha visto, se “masca”) que, es el poder lo que preocupa a los que de él viven o vegetan. Eso lo ve el más tonto que se fije un poco y hoy “los más tontos hacen relojes”. ¿Qué se debatió en Madrid que preocupe a los españoles: la inmensa mayoría de los 44 millones de “nacionales de España”?... nada, apenas nada. Por ello, nadie o apenas nadie de la… “subditoría” (de súbdito) dijo, o comentó nada… ¿para qué? Pensaron lógicamente y visto “el historial”… harán lo que les venga en gana (los “padres de las patrias”) o peor aún, lo que más les convenga. No creemos (no creemos ya) en nada o en apenas nada. Este sistema (dicen que “democrático” y se les llena la boca con tan gran palabra) se va hundiendo en la ineficacia y en la corrupción que es visible en… “el centro y los cuatro puntos cardinales… ángulos incluidos”.

Enormes y cuantiosas promesas se disipan en… “la nada”… impera el triste y preocupante… “vengan días y vengan ollas”. El asegurarse (los que mandan y sean “del color” que sean) no sólo el presente, sino el porvenir también y ello, tanto el de los que “manejan el guiso”, como el de “sus domésticos. apretabotones”… es lo que vemos con mayor claridad, desvergüenza y “cara de acero inoxidable”; de los que en vez de preocuparse de los grandes y menos grandes problemas de “la ciudadanía”, simplemente la ignoran y siempre “van a lo suyo”… ¿excepciones?... puede… ¿pero dónde están?
¿El súbdito?... pues como “los pecheros de Castilla”; o como los siervos de aquellas otras tierras “feudales” (que es lo que quieren los “nacionalistas”… volver a sus feudos y explotar la gleba)… que las había en aquellas épocas y “mucho después”.

Estamos hartos de circos y comedias. De hechos consumados a espaldas del manoseado pueblo; al que sólo se le tiene en cuenta para votar… y “votar a lotes preparados dictatorialmente”. La dictadura de partido, es incluso peor que “la otra” (que tanto critican) pues aquellas pasan; ésta y por cuanto vemos, piensa “eternizarse”, puesto que ya han pasado treinta años y “la cosa va a peor”… mucho peor y esto último, gracias al nefasto Zapatero y “su zapatería”; sin que yo defienda a “otros menos malos”, pero igualmente ineficaces.

Triste horizonte y cuyo fin no se ve… “por mucho que avancemos”.

Seguirán “los circos y comedias”, que reitero; son las del estado (con minúscula) y el de “las autonomías o autonosuyas” (aquí el que gobierna se considera dueño del cotarro) que por si alguien no lo sabe… en total suman veinte… es claro que incluyo a Ceuta y Melilla, pues todas… se aseguraron sus parlamentos y sus escaños, amén de todo lo que ello conlleva y lo enormemente costoso que nos resulta, a los que indefensos, no podemos librarnos de las ya excesivas cargas que se nos imponen, por medio de los impuestos directos e indirectos y con los que soportamos ya, a, dos millones y medio de empleados o enchufados a “la teta nacional”… pero que con tan “enorme ejército”, no hay suficiente para que al menos, tengamos seguridad en nuestras propiedades y en nuestra propia alcoba o dormitorio, ya que hasta allí, llegan ladrones y bandidos (“comunes”) y de los que nuestros “parlamentarios” (es cierto parlan, pero no hablan y menos razonan) simplemente y cómodamente sentados en sus sillones… pasan, dormitan y aprietan botones dócilmente, como si de autómatas se tratara… ¿lo son?.

Antonio García Fuente
(Escritor y filósofo)
www.jaen.ciudad.org (en ella más temas)

“BOTELLÓN Y BOTELLONISTAS” (Incultos y egoístas: Alcoholismo)

Aunque el mejor sentimiento (pienso) que hay que tener, para esa parte de la juventud (no toda: afortunadamente) es el de conmiseración o lástima. Pero precisamente por su estado precario y amorfo; hay que “inyectarles estímulos”, para ver que reaccionen y sepan; que la vida es dura… y que siempre lo fue. Por tanto no es en “el botellón” (ríos de alcohol) ni en el resto de las drogas, donde van a encontrar el verdadero estado del hombre en este planeta, que si civilizatoriamente decae ostensiblemente, pero es precisamente por ello mismo… “abandono de la verdadera formación y que ha formado a los hombres y mujeres de todos los tiempos y se han formado siempre, los que han querido y se lo han propuesto”.

Estos jóvenes (hablo de España, pero por lo que sé, ocurre en otros muchos países y de similar forma) se muestran con una extraña rebeldía (“extraño es el rebelde que en realidad no sabe ni lo que quiere o necesita”) y la que demuestran de dos formas absurdas, pero preocupantes. Una: la muy extendida forma de drogarse con “las mil drogas” que tienen al alcance de su ser (espectáculos masivos incluidos). Dos: la de jugarse “el pellejo”, con ejercicios absurdos y que disfrazan de deportes (que no lo son) y en los que entra de lleno, la velocidad en los vehículos a motor que insensatamente manejan de forma en que no sólo ellos peligran, sino los que llevan con ellos; o los que desgraciadamente, pillan por delante.

Así, aquí y “desde donde escribo”, se ha generalizado lo que ya tiene nombre y que figura en mi titular; pero al que ya acuden y desde países europeos, una juventud que sobrándoles el dinero; se lo gastan cada fin de semana en venir a España y “sumergirse en alcohol y drogas”, ya que aquí les resulta mucho más económico… incluso incluyendo el coste del viaje en avión. O sea que vienen, se emborrachan y se van, sin siquiera “haber dormido la mona”, en una cama y después haberse duchado.

Algunos de los nativos, incluso escriben a los periódicos y empleando incluso arrogancia y “victimismo”; afirman que beben en esos “amasijos urbanos”, por cuanto, con lo que pagarían por una copa en un bar, tienen lo suficiente para beberse una botella y que (ellos) hacen lo que sus antepasados hicieron, o sea beber en grupo; considerado en España como una tradición ancestral. Lo que de paso, resalta su incultura sobre esos hechos en que dicen basarse. Y diré por qué… “lo he visto”.

Primero, nuestros jóvenes debieran saber; el que sólo hace algunas décadas (pocas) aquellos jóvenes, disponían de mucho menos dinero que éstos de hoy y por el contrario; trabajaban mucho más y en unas condiciones bastante duras, pero que, a muchísimos; fueron las que los formaron. Aquellos jóvenes y en mayoría, iban a las modestas tabernas (hoy desaparecidas y no sabemos por qué) a beber vino barato (“el denominado peleón”) que allí les vendían por litros, medios litros o “cuartos de litro”, e incluso “chatos” o vasos de vino, de mayor o menor tamaño. Vino que al ser de nos más de once grados, había que beber mucho para “pillar la cogorza”. Pero si la pillaban, tenían que saber “sostenerla con cierta dignidad”; ya que al borracho alborotador (al que despreciábamos) si no lo sabía, era el dueño de la taberna, el que lo lanzaba a la calle como lo que era ya… “un desecho humano”; y si no podía él, se llamaba a la guardia municipal o urbana; o a la Guardia Civil y, “lo cogían de un puñado y lo llevaban al calabozo oportuno, donde lo mantenían bajo llave, hasta que pasada la borrachera, lo soltaban”… no sin advertirle, que la reincidencia por “escándalo”, conllevaría visita al juez y alguna condena carcelaria. En tal caso y por tales medidas, los borrachos asquerosos, eran contados; reitero que despreciados y por tanto no había muchos.

También esos jóvenes se reunían en grupo, pero tenían que tener donde (“la vía pública era respetada y ya sabemos el escándalo cómo era corregido por la autoridad, que entonces, sí que la había”). Así tenían que buscar la casa de uno u otro, el local comercial o cobertizo y allí, reunidos… compraban en las tabernas, la “cuartilla” (garrafa de cuatro litros) del citado vino, cerveza; o hacían ponche de melocotón (que fresco está riquísimo y es menos alcohólico) y con algunas tapas, igualmente compradas en la tienda de ultramarinos, se divertían, gastaban poco y no molestaban a nadie. Puesto que esa es otra… “a las doce de la noche, cada mochuelo a su olivo, y si no…?”

Y por último, estos “incultos” jóvenes, ni piensan, que el que mantiene un bar (como cualquier otro negocio) tiene que pagar impuestos; muchos impuestos, personal, instalación, limpieza, y todo lo que conlleva mantener un negocio. Muchos de los de hostelería, son lugares donde un matrimonio e hijos, trabajan duro; simplemente para ir saliendo en la vida de forma decente y pagar todo y a todo el mundo… pues como dijo aquel dueño de bar, a un imbécil cliente que se quejaba del precio de un café… “no, yo no cobro el café, el café lo regalo… lo que cobro, son las tazas, platos y vasos que se rompen, la limpieza, el azúcar, las servilletas, los kilowatios que consume la cafetera, los impuestos al ayuntamiento y al Estado y algunas cosillas más; y el levantarme a las cinco de la mañana, para que a las siete pueda usted tomar el café bien caliente y bien hecho”… oído aquello por aquel imbécil; pagó la consumición y ya no volvió a hablar de ello, en la vida.

Bueno, pues lo mismo “que aquel café”, ocurre con cualquier servicio, sea la cama de un hotel, el plato de comida en un restaurante; o cualquier otro (servicio) que el inteligente, no necesita que se lo detallen… ¿O sí?

Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
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“BOTELLÓN Y BOTELLONISTAS” (Incultos y egoístas: Alcoholismo)

Aunque el mejor sentimiento (pienso) que hay que tener, para esa parte de la juventud (no toda: afortunadamente) es el de conmiseración o lástima. Pero precisamente por su estado precario y amorfo; hay que “inyectarles estímulos”, para ver que reaccionen y sepan; que la vida es dura… y que siempre lo fue. Por tanto no es en “el botellón” (ríos de alcohol) ni en el resto de las drogas, donde van a encontrar el verdadero estado del hombre en este planeta, que si civilizatoriamente decae ostensiblemente, pero es precisamente por ello mismo… “abandono de la verdadera formación y que ha formado a los hombres y mujeres de todos los tiempos y se han formado siempre, los que han querido y se lo han propuesto”.

Estos jóvenes (hablo de España, pero por lo que sé, ocurre en otros muchos países y de similar forma) se muestran con una extraña rebeldía (“extraño es el rebelde que en realidad no sabe ni lo que quiere o necesita”) y la que demuestran de dos formas absurdas, pero preocupantes. Una: la muy extendida forma de drogarse con “las mil drogas” que tienen al alcance de su ser (espectáculos masivos incluidos). Dos: la de jugarse “el pellejo”, con ejercicios absurdos y que disfrazan de deportes (que no lo son) y en los que entra de lleno, la velocidad en los vehículos a motor que insensatamente manejan de forma en que no sólo ellos peligran, sino los que llevan con ellos; o los que desgraciadamente, pillan por delante.

Así, aquí y “desde donde escribo”, se ha generalizado lo que ya tiene nombre y que figura en mi titular; pero al que ya acuden y desde países europeos, una juventud que sobrándoles el dinero; se lo gastan cada fin de semana en venir a España y “sumergirse en alcohol y drogas”, ya que aquí les resulta mucho más económico… incluso incluyendo el coste del viaje en avión. O sea que vienen, se emborrachan y se van, sin siquiera “haber dormido la mona”, en una cama y después haberse duchado.

Algunos de los nativos, incluso escriben a los periódicos y empleando incluso arrogancia y “victimismo”; afirman que beben en esos “amasijos urbanos”, por cuanto, con lo que pagarían por una copa en un bar, tienen lo suficiente para beberse una botella y que (ellos) hacen lo que sus antepasados hicieron, o sea beber en grupo; considerado en España como una tradición ancestral. Lo que de paso, resalta su incultura sobre esos hechos en que dicen basarse. Y diré por qué… “lo he visto”.

Primero, nuestros jóvenes debieran saber; el que sólo hace algunas décadas (pocas) aquellos jóvenes, disponían de mucho menos dinero que éstos de hoy y por el contrario; trabajaban mucho más y en unas condiciones bastante duras, pero que, a muchísimos; fueron las que los formaron. Aquellos jóvenes y en mayoría, iban a las modestas tabernas (hoy desaparecidas y no sabemos por qué) a beber vino barato (“el denominado peleón”) que allí les vendían por litros, medios litros o “cuartos de litro”, e incluso “chatos” o vasos de vino, de mayor o menor tamaño. Vino que al ser de nos más de once grados, había que beber mucho para “pillar la cogorza”. Pero si la pillaban, tenían que saber “sostenerla con cierta dignidad”; ya que al borracho alborotador (al que despreciábamos) si no lo sabía, era el dueño de la taberna, el que lo lanzaba a la calle como lo que era ya… “un desecho humano”; y si no podía él, se llamaba a la guardia municipal o urbana; o a la Guardia Civil y, “lo cogían de un puñado y lo llevaban al calabozo oportuno, donde lo mantenían bajo llave, hasta que pasada la borrachera, lo soltaban”… no sin advertirle, que la reincidencia por “escándalo”, conllevaría visita al juez y alguna condena carcelaria. En tal caso y por tales medidas, los borrachos asquerosos, eran contados; reitero que despreciados y por tanto no había muchos.

También esos jóvenes se reunían en grupo, pero tenían que tener donde (“la vía pública era respetada y ya sabemos el escándalo cómo era corregido por la autoridad, que entonces, sí que la había”). Así tenían que buscar la casa de uno u otro, el local comercial o cobertizo y allí, reunidos… compraban en las tabernas, la “cuartilla” (garrafa de cuatro litros) del citado vino, cerveza; o hacían ponche de melocotón (que fresco está riquísimo y es menos alcohólico) y con algunas tapas, igualmente compradas en la tienda de ultramarinos, se divertían, gastaban poco y no molestaban a nadie. Puesto que esa es otra… “a las doce de la noche, cada mochuelo a su olivo, y si no…?”

Y por último, estos “incultos” jóvenes, ni piensan, que el que mantiene un bar (como cualquier otro negocio) tiene que pagar impuestos; muchos impuestos, personal, instalación, limpieza, y todo lo que conlleva mantener un negocio. Muchos de los de hostelería, son lugares donde un matrimonio e hijos, trabajan duro; simplemente para ir saliendo en la vida de forma decente y pagar todo y a todo el mundo… pues como dijo aquel dueño de bar, a un imbécil cliente que se quejaba del precio de un café… “no, yo no cobro el café, el café lo regalo… lo que cobro, son las tazas, platos y vasos que se rompen, la limpieza, el azúcar, las servilletas, los kilowatios que consume la cafetera, los impuestos al ayuntamiento y al Estado y algunas cosillas más; y el levantarme a las cinco de la mañana, para que a las siete pueda usted tomar el café bien caliente y bien hecho”… oído aquello por aquel imbécil; pagó la consumición y ya no volvió a hablar de ello, en la vida.

Bueno, pues lo mismo “que aquel café”, ocurre con cualquier servicio, sea la cama de un hotel, el plato de comida en un restaurante; o cualquier otro (servicio) que el inteligente, no necesita que se lo detallen… ¿O sí?

Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
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“BOTELLÓN Y BOTELLONISTAS” (Incultos y egoístas: Alcoholismo)

Aunque el mejor sentimiento (pienso) que hay que tener, para esa parte de la juventud (no toda: afortunadamente) es el de conmiseración o lástima. Pero precisamente por su estado precario y amorfo; hay que “inyectarles estímulos”, para ver que reaccionen y sepan; que la vida es dura… y que siempre lo fue. Por tanto no es en “el botellón” (ríos de alcohol) ni en el resto de las drogas, donde van a encontrar el verdadero estado del hombre en este planeta, que si civilizatoriamente decae ostensiblemente, pero es precisamente por ello mismo… “abandono de la verdadera formación y que ha formado a los hombres y mujeres de todos los tiempos y se han formado siempre, los que han querido y se lo han propuesto”.

Estos jóvenes (hablo de España, pero por lo que sé, ocurre en otros muchos países y de similar forma) se muestran con una extraña rebeldía (“extraño es el rebelde que en realidad no sabe ni lo que quiere o necesita”) y la que demuestran de dos formas absurdas, pero preocupantes. Una: la muy extendida forma de drogarse con “las mil drogas” que tienen al alcance de su ser (espectáculos masivos incluidos). Dos: la de jugarse “el pellejo”, con ejercicios absurdos y que disfrazan de deportes (que no lo son) y en los que entra de lleno, la velocidad en los vehículos a motor que insensatamente manejan de forma en que no sólo ellos peligran, sino los que llevan con ellos; o los que desgraciadamente, pillan por delante.

Así, aquí y “desde donde escribo”, se ha generalizado lo que ya tiene nombre y que figura en mi titular; pero al que ya acuden y desde países europeos, una juventud que sobrándoles el dinero; se lo gastan cada fin de semana en venir a España y “sumergirse en alcohol y drogas”, ya que aquí les resulta mucho más económico… incluso incluyendo el coste del viaje en avión. O sea que vienen, se emborrachan y se van, sin siquiera “haber dormido la mona”, en una cama y después haberse duchado.

Algunos de los nativos, incluso escriben a los periódicos y empleando incluso arrogancia y “victimismo”; afirman que beben en esos “amasijos urbanos”, por cuanto, con lo que pagarían por una copa en un bar, tienen lo suficiente para beberse una botella y que (ellos) hacen lo que sus antepasados hicieron, o sea beber en grupo; considerado en España como una tradición ancestral. Lo que de paso, resalta su incultura sobre esos hechos en que dicen basarse. Y diré por qué… “lo he visto”.

Primero, nuestros jóvenes debieran saber; el que sólo hace algunas décadas (pocas) aquellos jóvenes, disponían de mucho menos dinero que éstos de hoy y por el contrario; trabajaban mucho más y en unas condiciones bastante duras, pero que, a muchísimos; fueron las que los formaron. Aquellos jóvenes y en mayoría, iban a las modestas tabernas (hoy desaparecidas y no sabemos por qué) a beber vino barato (“el denominado peleón”) que allí les vendían por litros, medios litros o “cuartos de litro”, e incluso “chatos” o vasos de vino, de mayor o menor tamaño. Vino que al ser de nos más de once grados, había que beber mucho para “pillar la cogorza”. Pero si la pillaban, tenían que saber “sostenerla con cierta dignidad”; ya que al borracho alborotador (al que despreciábamos) si no lo sabía, era el dueño de la taberna, el que lo lanzaba a la calle como lo que era ya… “un desecho humano”; y si no podía él, se llamaba a la guardia municipal o urbana; o a la Guardia Civil y, “lo cogían de un puñado y lo llevaban al calabozo oportuno, donde lo mantenían bajo llave, hasta que pasada la borrachera, lo soltaban”… no sin advertirle, que la reincidencia por “escándalo”, conllevaría visita al juez y alguna condena carcelaria. En tal caso y por tales medidas, los borrachos asquerosos, eran contados; reitero que despreciados y por tanto no había muchos.

También esos jóvenes se reunían en grupo, pero tenían que tener donde (“la vía pública era respetada y ya sabemos el escándalo cómo era corregido por la autoridad, que entonces, sí que la había”). Así tenían que buscar la casa de uno u otro, el local comercial o cobertizo y allí, reunidos… compraban en las tabernas, la “cuartilla” (garrafa de cuatro litros) del citado vino, cerveza; o hacían ponche de melocotón (que fresco está riquísimo y es menos alcohólico) y con algunas tapas, igualmente compradas en la tienda de ultramarinos, se divertían, gastaban poco y no molestaban a nadie. Puesto que esa es otra… “a las doce de la noche, cada mochuelo a su olivo, y si no…?”

Y por último, estos “incultos” jóvenes, ni piensan, que el que mantiene un bar (como cualquier otro negocio) tiene que pagar impuestos; muchos impuestos, personal, instalación, limpieza, y todo lo que conlleva mantener un negocio. Muchos de los de hostelería, son lugares donde un matrimonio e hijos, trabajan duro; simplemente para ir saliendo en la vida de forma decente y pagar todo y a todo el mundo… pues como dijo aquel dueño de bar, a un imbécil cliente que se quejaba del precio de un café… “no, yo no cobro el café, el café lo regalo… lo que cobro, son las tazas, platos y vasos que se rompen, la limpieza, el azúcar, las servilletas, los kilowatios que consume la cafetera, los impuestos al ayuntamiento y al Estado y algunas cosillas más; y el levantarme a las cinco de la mañana, para que a las siete pueda usted tomar el café bien caliente y bien hecho”… oído aquello por aquel imbécil; pagó la consumición y ya no volvió a hablar de ello, en la vida.

Bueno, pues lo mismo “que aquel café”, ocurre con cualquier servicio, sea la cama de un hotel, el plato de comida en un restaurante; o cualquier otro (servicio) que el inteligente, no necesita que se lo detallen… ¿O sí?

Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
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