No es nada nuevo, por cuanto toda guerra lleva consigo perversiones; y si bien de siempre, las masas o pueblos no beligerantes, han sido masacrados a capricho de los asesinos guerreros; hoy se llega al inaudito caso de que mueren muchos miles y miles de desgraciados habitantes de cualquier lugar en guerra, que militares de ejércitos regulares o no; y donde (generalmente”) hablan de un honor que hoy no se ve por ninguna parte; o sea que… “el honor del guerrero está paralelo al del político, puesto que sin ellos, seguro que no habría guerras tan devastadoras”.
La perversidad que hoy comento, se puede sintetizar en pocas palabras, puesto que es algo así cómo… “Yo y sibilinamente os provoco la guerra que os va a destruir vuestras casas, ciudades, vías de comunicación y os va a matar a cientos o miles de vosotros, amén de los heridos y lisiados de por vida… y luego con el mismo dinero con que provoco la guerra, os voy a obsequiar con cantidades suficientes, como para que reconstruyáis vuestros hogares y vayáis viviendo mientras con vuestro propio esfuerzo, os recuperáis pues os necesitamos como materia prima imprescindible”.
O sea que según se informa; los mismos que facilitan las armas y dinero, para que ese “ejército irregular” o terrorista, que provoca constantemente a Israel, desde el Sur del Líbano y que (se dice y afirma) es mantenido por el dinero de Irán principalmente, si bien también “ayuda” Siria; es el que ahora y estando aún la devastación humeante y apareciendo cientos de cadáveres en los escombros de la guerra… “Reparte fajos de billetes… ¡de dólares norteamericanos! (el dinero no tiene ni bandera ni patria) a los damnificados y con propia maquinaria pesada, remueve y ayuda a reconstruir el caos; todo ello fuera del control del Gobierno libanés, puesto que este ejército irregular (se dice) actúa por sus propios designios; o más bien, empujado por el dinero de los ayatolás iraníes, que junto con su fanatismo, se apoyan en el dinero, puesto que y como dijeron tantos… “el dinero, es el dinero y con él se compra todo”; por ello recurren al dinero más sólido del actual mundo… ¡¡Los fajos de billetes que emiten en el odiado y despreciado Occidente!!… ¿La religión y los profetas?... “bueno, bueno, eso sirve para fanatizar al otro ejército de tontos e idiotas, que creen que al cielo se llega con suicidios y matando a cuantos más inocentes mucho mejor”. ¿Alabado sea Dios y… su único profeta?... Según los musulmanes… que siguen ignorando las leyes mosaicas, que sin embargo dicen aceptar y que recoge el “Libro de Mahoma”… ¿Dónde estarán las prácticas de… no matarás, amarás al prójimo como a ti mismo, etc. etc. etc. No de eso ni nombrarlo siquier…, no interesa en absoluto y menos a los que viven de las religiones fanatizadas y convertidas en escuelas de asesinos… ¡Y además se creen iluminados y enviados por Dios!
Sí… es terrible ver la verdad casi transparente y tener que aguantar impotentemente, tanta mentira de cada uno de los que nos gobiernan (es un decir) y saber que seguirán ocurriendo, las cosas que interesan a unos pocos “buitres carroñeros”; que sólo piensan en enriquecerse, mantenerse en el poder y poco más… ¿los pueblos?... pues para lo de siempre, crear, construir, pagar y mantener a “los buitres para que estén bien alimentados y no desaparezca la plaga”.
La perversidad que hoy comento, se puede sintetizar en pocas palabras, puesto que es algo así cómo… “Yo y sibilinamente os provoco la guerra que os va a destruir vuestras casas, ciudades, vías de comunicación y os va a matar a cientos o miles de vosotros, amén de los heridos y lisiados de por vida… y luego con el mismo dinero con que provoco la guerra, os voy a obsequiar con cantidades suficientes, como para que reconstruyáis vuestros hogares y vayáis viviendo mientras con vuestro propio esfuerzo, os recuperáis pues os necesitamos como materia prima imprescindible”.
O sea que según se informa; los mismos que facilitan las armas y dinero, para que ese “ejército irregular” o terrorista, que provoca constantemente a Israel, desde el Sur del Líbano y que (se dice y afirma) es mantenido por el dinero de Irán principalmente, si bien también “ayuda” Siria; es el que ahora y estando aún la devastación humeante y apareciendo cientos de cadáveres en los escombros de la guerra… “Reparte fajos de billetes… ¡de dólares norteamericanos! (el dinero no tiene ni bandera ni patria) a los damnificados y con propia maquinaria pesada, remueve y ayuda a reconstruir el caos; todo ello fuera del control del Gobierno libanés, puesto que este ejército irregular (se dice) actúa por sus propios designios; o más bien, empujado por el dinero de los ayatolás iraníes, que junto con su fanatismo, se apoyan en el dinero, puesto que y como dijeron tantos… “el dinero, es el dinero y con él se compra todo”; por ello recurren al dinero más sólido del actual mundo… ¡¡Los fajos de billetes que emiten en el odiado y despreciado Occidente!!… ¿La religión y los profetas?... “bueno, bueno, eso sirve para fanatizar al otro ejército de tontos e idiotas, que creen que al cielo se llega con suicidios y matando a cuantos más inocentes mucho mejor”. ¿Alabado sea Dios y… su único profeta?... Según los musulmanes… que siguen ignorando las leyes mosaicas, que sin embargo dicen aceptar y que recoge el “Libro de Mahoma”… ¿Dónde estarán las prácticas de… no matarás, amarás al prójimo como a ti mismo, etc. etc. etc. No de eso ni nombrarlo siquier…, no interesa en absoluto y menos a los que viven de las religiones fanatizadas y convertidas en escuelas de asesinos… ¡Y además se creen iluminados y enviados por Dios!
Sí… es terrible ver la verdad casi transparente y tener que aguantar impotentemente, tanta mentira de cada uno de los que nos gobiernan (es un decir) y saber que seguirán ocurriendo, las cosas que interesan a unos pocos “buitres carroñeros”; que sólo piensan en enriquecerse, mantenerse en el poder y poco más… ¿los pueblos?... pues para lo de siempre, crear, construir, pagar y mantener a “los buitres para que estén bien alimentados y no desaparezca la plaga”.
Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
www.jaen.ciudad.org (allí más temas)
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